Ludueña y González vuelven a San Isidro y Castro sigue en Ameghino
Los clubes de San Francisco y Villa María apuntan a armarse

Mientras los torneos ya se suspendieron todos y no hay horizonte para el regreso del básquetbol ni profesional ni amateur, los clubes siguen apostando al futuro y quieren estar más arriba.
Así hoy San Isidro anunció el regreso de Santiago Ludueña, «el chivito», el jugador que en la temporada 2018/2019, Ludueña disputó los 60 encuentros, promediando 7.2 puntos y 3 asistencias. para los Halcones y ahora para disputar la Liga Argentina 2020/2021.
Por la noche anunció también la llegada de Santiago González, el pívot santafesino regresa a la entidad de San Francisco tras haber jugado la temporada pasada en Salta Basket, donde disputó 30 partidos con un promedio de 9 puntos, 9.5 rebotes y 25.2 minutos de juego.
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Santiago «Chivo» Ludueña formó parte del plantel campeón de la Conferencia Norte y viene de jugar la última temporada en Villa San Martín de Resistencia, Chaco. Allí jugó 26 de los 30 partidos, promediando 10 puntos y 4.7 asistencias en 26.1 minutos de juego.
González disputó la temporada 2016/2017 en Los Halcones saliendo MVP, la temporada 2017/2018 y fue campeón de la Norte en la temporada 2018/2019, siendo capitán todos esos años
También trascendió que San Isidro está tras el pivote, también cordobés Tomás Ligorria que la temporada pasada estuvo jugando en la patagonia.
Por su parte Ameghino de Villa María confirmó la continuidad de Pablo Castro al frente del primer equipo y asi superará los 10 años como máximo entrenador en el equipo villamariense.
En declaraciones a EL Diario de Villa María Castro dijo: «“Estamos construyendo día a día algo que era una ilusión y hoy miramos para atrás y es algo increíble. Soy agradecido de que el club que haya dado la posibilidad de hacerlo, de crecer, de soñar”, enfatizó». Y la misma nota dice: «Una de las cosas que pueden llegar a darse la próxima temporada es que Ameghino juegue en el nuevo Salón de los Deportes que la Municipalidad de Villa María está construyendo de la mano de un grupo inversor privado y que tendrá capacidad para unas 1.500 personas. “Eso me ilusiona muchísimo. Creo que la ciudad se merecía ese espacio. Cada vez que pude lo afirmé y todo el club cree lo mismo. Es una ciudad que se merece un estadio de esas características y siempre motiva eso. Tratar de darle a la ciudad la posibilidad de brindar un espectáculo deportivo en un escenario diferente es un agrado y es una forma de motivar a que las familias se acerquen al deporte”, dijo Castro al respecto.