Quimsa y Boca Juniors jugaron la final de la temporada pasada en la Liga Nacional de Básquet. La definición del torneo más importante de nuestro país no fue la esperada. Ni por parte del Xeneize, ni por el resto de la comunidad basquetbolística argentina. Se esperaba una serie apasionante. Tanto como larga. No terminó siendo ni una cosa ni la otra. Quimsa tenía un gran equipo. Boca Juniors, también.
Los dos habían mostrado cosas interesantes durante toda la temporada. Cosas, que los llevaron a ganar y a meterse en la final del certamen. Merecidamente, por cierto. La Fusión aprovechó todo su potencial en el playoff definitorio. El Xeneize estuvo lejos de su mejor versión. Los santiagueños barrieron a los porteños. Quimsa ganó 4 a 0 la serie y a otra cosa mariposa, como quien dice.
Este año, estos dos equipos volvieron a encontrarse, claro. Lo hicieron primero en la fase regular y ahora, tal vez, en una final anticipada. En semis es que están jugando. Desde hace un par de días ya. Ayer, se disputó el punto número cuatro de este plaoff. A dicho encuentro, Quimsa llegó con ventaja de 2 a 1.
La Fusión había ganado el primer partido y perdió el segundo en casa. En La Bombonerita recuperó lo perdido. El equipo de Leandro Ramella volvió a pasar al frente en la serie y quedó a un triunfo de la clasificación a la final. Boca Juniors estaba obligado a ganar para forzar una definición en Santiago del Estero. En todos los partidos, hubo paridad. En el de este sábado, no fue la excepción. Los dirigidos por Gonzalo Pérez se impusieron por 84 a 70. El martes, entonces, habrá quinto partido en el estadio Ciudad de la capital santiagueña.
Lo que pasó
El Xeneize ganó con una gran actuación general y otra superlativa de Langston. El extranjero terminó el cotejo con 20 puntos, 81% de efectividad en tiros de campo en algo más de 20 minutos.
Con mucho juego colectivo asociado, el Xeneize venció a la Fusión para llevar la definición a un quinto partido. Con una actuación superlativa de Wayne Langston con 20 puntos, 81% de efectividad en tiros de campo en algo más de 20 minutos.
Leonel Schattmann fue la otra carta goleadora del equipo de la Ribera. El perimetral contribuyó con 19 unidades y un 80% en tiros de dos puntos. Quimsa, por su parte, tuvo pasajes, rachas buenas, pero nunca llegó a ponerse en partido más allá de descontar en el marcador.
El local arrancó muy bien. Lo hizo empujado por su gente, que una vez más colmó el estadio Luis Conde. Y no sólo eso, sino que alentó desde el mismo salto inicial hasta la chicharra final. Boca ganó el primer parcial y repitió en el segundo. Antes de irse al vestuario, borró casi de la cancha a su rival. Fue en este chico que se vio, tal vez, lo peor de Quimsa. No sólo en este cotejo, sino también en la serie toda. La Fusión volvió dispuesto a achicar la desventaja. Lo consiguió en el tercer período. Pero, en el cuarto, Boca Juniors volvió a tomar el control en el rectángulo de juego. También lo hizo, claro, en el marcador. En un parcial de alto goleo, con los ataques siendo mejores que las defensas, el dueño de casa se floreó y terminó festejando la victoria tanto como su continuidad en el playoff. El martes ya no habrá mañana para ninguno.
La síntesis
Boca Juniors (84): J. Vildoza 8, L. Schattmann 19, S. Vega 12, M. Mata 13 y W. Langston 20 (FI); L. Mainoldi, J. Guerrero, M. Rodríguez, R. Barber 12 y J. Defelippo. Entrenador: Gonzalo Pérez. Quimsa (70): J. Brussino 5, B. Robinson 17, E. Basabe 12, F. Ramírez Barrios 14 y T. Gallizzi 5 (FI); S. Acevedo 2, F. Rolfi 3, B. Sansimoni 12, E. Vasirani y F. Zezular. Entrenador: Leandro Ramella. Parciales: 24-18, 18-8, 17-24 y 25-20. Árbitros: O. Brítez, L. Zalazar y A. Zanabone. Cancha: La Bombonerita (CABA).
Fuente: Tiempo Sur.
